jueves, 13 de octubre de 2011

CASO MURDOCH

El periodismo amarillo o sensacionalista, ha llegado a un punto en que se pasa  a  la ilegalidad, se debe debe sacar a la luz cosas ocultas, pero no interceptar la privacidad de las personas, siempre y cuando no sean delictivas.
No se debe bajo ningún concepto interrumpir las investigaciones`policiales ni ocultar pruebas, para poder incrementar la tirada del periódico o tabloide.
Hemos llegado a un punto en la actualidad que todas las empresas ponen unas metas que hay que llegar cueste lo que cueste y caiga quien caiga con tal de ser el número uno y ganar dinero, personas que podían tener un buen trabajo periodístico en este caso, y sin embargo se han quedado en el camino y con su fiabilidad profesional por los suelos.
Entre otras cosas graves es el cierre del  News of the World, después de 168 años de existencia ó del periodista Sean Horace, muerto en circunstancia poco normales.
El honor, la honestidad, la veracidad, son palabras casi obsoletas en esta época que nos ha tocado vivir, a cambio del poderoso caballero que es DON DINERO.

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